Aturde, no para de hablar. Molesta, desorienta y algo de todo esto parece normal. Tiene el juego de reiterar y las secuelas rebotan. No sabe y se nota. No es tonta; pero se escapan las frases entre neuronas sin memoria. Inventa, delira; no todas las historias pueden ser únicas y la torpeza se empieza a notar.
Ya esta de vuelta, ni importa cuanto pueda faltar, los caminos se acortan.
¡Tirate o salta!
jueves, 1 de julio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario