viernes, 26 de agosto de 2022

Uno

Uno entre millones. En medio de la marea. Vaivenes y fuerzas ajenas, ejercidas. El sometimiento de la masividad. Colectivo cultural. 
Intentando tocar fondo. Apoyado y estrujando, ese desgaste en mantener la forma. Húmedo y cabeceando para respirar. Texturas. Vapor. Encimados. Agolpados. Parecidos pero distintos.
No tan distintos. Sin mirarnos a los ojos. Solo estrellas. Abruma tanta inmensidad. Pasatiempo general. La doctrina popular. 

Intento pensar.

En una.

Era uno.
Y siempre es bueno recordarlo.
El valor de la distancia.
Un pensamiento. Aislado y permanente.
No somos lo que compramos.
Soy más interesante cuando me callo. 



No me olvides.

No me olvido, por más que intente dejarme escondido en un rincón.  Por más que lo intente vuelvo a respirar y el sinsentido de estar vivo, vuelve a empezar. Es rutina. Mecánica y aprendida. Siempre presente. Se impone. Se hace real. Se vive. Se impregna. Se activa el pasado. Se hace recuerdo y voraz. Cambia de estado, subjetivo material. Flotaba de aire. Espeso berenjenal. Vuelven las cargas, peso en vacio, sólido y vanal. Se agrieta. Escondo la mueca amarga. Ensayo el modo alegre. Fijo frente al espejo. Bienvenido. Hagamos el intento. Empecemos otra vez.

jueves, 18 de agosto de 2022

Entre sábados

Por primera vez es habitual encontrarte.
Soñar, despertarme y volver a soñar. 
Acompañarte de la mano.
Con la tranquilidad de hablarte todas las noches.
Perder el tiempo y acurrucarnos tanto.

Lunga

Si pudiera hablar del principio, sería un nudo de silencio al verte pasar. 
Un sobresalto en el aliento. 
Un cosquilleo nervioso en los dedos.
La extraña necesidad de conocerte.
Y la zonza esperanza de volver a verte.

era antes y ahora

Antes que pudiera entender.
Mucho antes de saber como se llamaba.
Por intuición, invadido y sobrepasado. Excedido en mi. Solo buscaba estar cerca. Permanecer. 
Sin razones ni palabras. 
El amor.