Volverle a ver, sin la luz y apenas tarde.
Volverme loco en distancias, y a tus manos mi verdad.
Volver a pocos pasos, harto; a tanto menos que un poco.
Y para nosotros, desnudos hasta mil latidos y ahogados de ilusión.
Viajeros de monte en flor, arándanos azules y el verde en tus ojos, claro como el mar.
Inteligentes para los silencios, oportunos para el amor.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario